Superación del miedo al dentista desde un punto de vista psicológico

En las clínicas odontológicas son frecuentes los casos de personas que presentan miedo , la raíz de estos miedos suele estar la mayoría de las veces en experiencias previas durante la niñez, ese miedo de inicio temprano que suele llevar a la postergación de las revisiones anuales, y por tanto hace que no se mantenga el cuidado y los hábitos necesarios para mantener nuestra boca sana, esto termina derivando en que las consecuencias sean cada vez peores, llegando en los peores casos a la pérdida de piezas dentales, con lo cual el miedo se hace cada vez mayor porque ya no se trata de ir a una revisión o un tratamiento sencillo, sino que para subsanar los daños necesitamos de tratamientos mas invasivos, a los que por consiguiente tendremos mas miedo. Veamos con un gráfico como funciona este círculo que se va auto alimentando.

Primera Fase

En la Primera Fase , durante la infancia, los niños deben vivir acudir al dentista como un proceso mas, como padres debe ofrecérseles una explicación previa , darles información sobre que se les va a hacer y donde van a ir adaptada a su edad ( niños muy pequeños se les puede explicar el proceso mediante marionetas o muñecos), darles mensajes tranquilizadores, no contagiarlos de nuestro miedo si lo tenemos, decirles que puede que sientan algo de molestia porque le van a mirar los dientes pero no dolor, combinar la visita con algo divertido, coger cita a primera hora para no tenerles que hacer esperar demasiado y que se pongan nerviosos, también podemos utilizar técnicas de relajación y mindfullnes para tranquilizarlos mientras entran en consulta, una vez terminada la consulta reforzarles positivamente, “que bien lo has hecho”, “eres un campeón” esto les ayuda a aumentar su confianza en sí mismos y sentirse más seguros. También existen clínicas especializadas para niños donde el ambiente esta meticulosamente cuidado para hacerles sentir a gusto, podemos consultar las de la zona.

Segunda Fase

Segunda Fase, he tenido experiencias previas negativas y me da miedo ir al dentista, normalmente cuando se está en esta fase se tienen una serie de Distorsiones Cognitivas, dadas por válidas sin haberlas puesto a prueba, y que hacen que postergue el acudir a consulta, lo primero que tengo que hacer es identificar cuáles son, y luego reflexionar sobre ellas, en psicología esto se llama Dialogo Socrático, verifico la veracidad, su probabilidad de ocurrencia y en que me beneficia pensar así. Ejemplos de  esta etapa pueden ser “ seguro que me va a doler mucho”,  “a lo mejor se me cura solo”, “ ya el mes que viene estará mejor”, este tipo de pensamiento además de no tener ninguna utilidad a lo que lleva es a atrasar un proceso que tengo que hacer y que cuanto mas deje peores consecuencias tendrá.

Tercera Fase

Tercera fase, la postergación, en esta fase las medidas que puedo tomar son las de cambiar la preocupación por la ocupación,  ocuparse significa que puedo buscar un centro dental de confianza, que me trasmita seguridad y con buenos profesionales, acudir antes de pedir cita para pedir información, conocer el lugar y estar bien informado resolviendo mis dudas me ayudará a reducir mi ansiedad. Es recomendable que pida cita a primera hora, reducir el tiempo de espera y el contacto con otros pacientes que puedan estar nerviosos me ayudara a mantenerme en calma. Como en el caso de los niños puedo utilizar alguna técnica de relajación previa o utilizar el mindfullnes mientras espero. También puedo utilizar técnicas de distracción como leer una revista, mantener una conversación o ver la tele para no centrarme en los pensamientos perturbadores.

Cuarta Fase

Cuarta Fase, cuando hay un empeoramiento de la patología, las distorsiones Cognitivas en este caso varían y son del tipo “ ya para que si de todas formas voy a perder el diente”, “ya iré para que me lo hagan todo junto”, “prefiero pasarlo todo del tirón una sola vez”, este tipo de pensamientos son de evitación de enfrentarme a una situación desagradable e igual que en el caso anterior muchas veces no tienen fundamentación, cuando los tratamientos dentales son mas invasivos, del tipo de extracción de piezas dentales o colocación de implantes, siempre se llevan a cabo bajo algún tipo de anestesia o sedación, con lo cual podremos sentir las molestias propias de una postura incómoda, o tener que permanecer con la boca abierta pero no propiamente dolor, es importante que nos recordemos esto a nosotros mismos para tranquilizarnos, y no tener ansiedad, también es importante que consultemos y nos informemos sobre todo aquello que este alimentando nuestros miedos. Y por último no olvidemos reforzarnos positivamente por nuestros logros.

Quinta Fase

Quinta fase, cuando siento culpa o vergüenza por tener miedo y no haber acudido antes al dentista, sentirnos culpables no nos beneficia en nada, al contrario merma nuestra autoestima y nos hace sentirnos mal, somos responsables de nuestra salud bucal pero no culpables de no haberlo realizado correctamente.

En casos extremos en los cuales derive en una fobia, miedo irracional, le recomiendo consulte a un psicólogo especializado en Desensibilización Sistemática, que es una técnica psicológica ampliamente documentada e investiga, que le ayuda a superar sus miedos de forma gradual y sin que le suponga un sobre esfuerzo.
En nuestra Clínica dental en Torremolinos Doctores B. Murry implantamos todos los métodos precisos para dar tranquilidad a nuestro paciente y sientan absoluta comodidad con su dentista.

Contrario a lo que se piensa, es común que los profesionales en odontología sufran de molestias físicas por el trabajo. La aparición de enfermedades sistémicas en odontología producto de las labores realizadas en esta profesión es un hecho ya estudiado. Por eso, te mostramos los mitos y ayudamos tanto a pacientes como profesionales a tener la perspectiva correcta de esta profesión.

Definición de enfermedad profesional

La Ley General de la Seguridad Social (LGSS) en el artículo 116, define enfermedad profesional como:

“La contraída a consecuencia del trabajo ejecutado por cuenta ajena en las actuaciones que se especifican en el cuadro aprobado por las disposiciones de aplicación y desarrollo de esta ley. Siempre que la enfermedad proceda por la acción de elementos o sustancias que en dicho cuadro se indican para cada enfermedad profesional”.

Esta definición abarca patologías de todo tipo. No obstante, hoy vamos a hablar de las enfermedades más comunes en odontología que afectan al Sistema Musculo-esquelético de estos profesionales. Además, le enseñaremos cómo intentar prevenirlas.

Causas de las enfermedades profesionales en Odontología

Por lo general, la aparición de molestias en estos profesionales no aparece de forma súbita; suele ser lenta y difusa. De hecho, con un poco de reposo y tratamiento farmacológico, la sintomatología se alivia de forma pasajera. Sin embargo, al poco tiempo vuelve a aparecer, quizás de forma permanente y a veces incapacitante para desarrollar la actividad profesional.

Por otro lado, existen algunas situaciones que agravan el problema, como posturas forzadas o lugares de trabajo mal diseñados. También, herramientas, vibraciones y movimientos repetitivos durante tiempos prolongados son otras causas habituales de las alteraciones musculo-esqueléticas de los odontólogos.

Estas situaciones obligan al dentista a adoptar posiciones que van a sobrecargar los discos intervertebrales y la musculatura. En consecuencia, pueden aparecer Hernias Discales, Cervicalgias, Lumbalgias, Síndrome del Túnel Carpiano, y más.

Ahora bien, consideramos una postura forzada, aquella que supone exponer a la articulación a más de la mitad de su amplitud de forma regular durante su jornada laboral.

Por otra parte, se considera la repetitividad cuando la duración de los movimientos que se realizan ocupa más del 50% de la jornada laboral. En los movimientos repetitivos se produce una alteración del trabajo muscular dinámico; por lo cual, surgen contracciones y relajaciones musculares. Debido a esto, pueden aparecer trastornos tendinosos, bursitis y artritis, entre otros.

También, hay que considerar el trabajo muscular estático que es aquel en que la contracción es continua y se mantiene en el tiempo. Este caso tiene más relación con la postura, y es el responsable de las lesiones de la musculatura profunda de la espalda.

Principales enfermedades laborales en Odontólogos

Las regiones anatómicas más afectadas suelen ser la columna cervical, columna lumbar  y  muñecas. También, es común la aparición de molestias o dolor en codos, columna dorsal y hombros. En todas ellas, la ergonomía juega un papel fundamental ya que puede ayudar a prevenirlas de manera efectiva.

 

Lesiones	Síntomas	Etiología
Bursitis	Inflamación en el lugar de la lesión.	Hacer presión sobre el codo o movimientos repetitivos.
Cervicalgias y lumbalgias	Inflamación de los músculos, cefaleas, dolor incapacitante.	Posturas forzadas.
Dedos en resorte	Dificultad para mover los dedos y resalte del tendón.	Movimientos repetitivos, usar utensilios durante mucho tiempo y con fuerza
Epicondilitis lateral	Inflamación en la zona del epicóndilo, dificultad para realizar fuerza y dolor.	Movimientos repetitivos.
Sdme. del Túnel Carpiano	Parestesias en la mano, pérdida de fuerza.	Uso de herramientas vibratorias, movimientos repetitivos en posturas forzadas.
Tenosinovitis	Dolor, inflamación y dificultad para usar las manos.	Movimientos repetitivos y posturas forzadas.

Prevención de enfermedades profesionales en Odontología

Las enfermedades sistémicas odontología pueden prevenirse mediante la realización de actividad física moderada. Así también, la realización de estiramientos encaminados a la flexibilización de la musculatura. Ambas se emplean en la actividad profesional,  la adecuación del puesto de trabajo y una correcta ergonomía.

Realizar actividad física moderada ayuda a liberar endorfinas que ayudan a mantener el bienestar físico y cognitivo. También, es recomendable para una buena armonización en el trabajo de los músculos del cuerpo. Por otro lado, realizar estiramientos ayuda a prevenir las lesiones por compresión, tendinosas y de la musculatura profunda.

Por otro lado, la adecuación del puesto de trabajo y una correcta ergonomía ayudan a prevenir lesiones de tipo postural y tendinoso. Aunque es cierto que no siempre es posible mantener una postura correcta, beneficia esforzarse por mantener buenos hábitos posturales.

Por supuesto, el odontólogo tendrá que adecuarse a las condiciones del paciente o de los problemas que nos encontramos en el trabajo diario. En estos casos, es adecuado hacer pausas para poder realizar lo estiramientos (no superar los 2-3 minutos). Además, intentar recuperar la posición óptima para seguir las labores.

Ahora bien, como recomendación final, se sugiere hacer una visita periódica al Fisioterapeuta u Osteópata. Por cuanto, estos ayudan de forma muy efectiva a prevenir la aparición de las tan indeseadas enfermedades profesionales en odontología.

Por eso, visítenos en nuestra clínica dental en Torremolinos donde estaremos encantados de ayudarle y asesorarle sobre cualquier problema bucal que le incomode.